María Virginia Dorrejo tras recuperar su hijo: «Ahora es tiempo de reconstruir nuestras vidas con amor»

Santo Domingo.- La angustia que invadía a la abogada puertoplateña María Virginia Dorrejo 13 años después llegó a su fin, tras reencontrarse con su hijo del cual fue separada el 4 de marzo del año 2011 cuando el pequeño fue raptado su padre, Marco Aurelio Giusseppe Streit desde la Fiscalía de Puerto Plata.

Para Virginia Dorrejo «ahora es tiempo de reconstruir» su vida junto a Dorian, luego de recorrer diferentes países en busca de su vástago, en una búsqueda incansable en la que duró más de una década.

«Con gran alegría, comparto con ustedes que finalmente he encontrado a mi hijo Dorian. Agradezco profundamente a todas las personas, instituciones y medios de comunicación por su apoyo y acompañamiento durante estos mas de 13 años de búsqueda incansable. Como madre, les pido encarecidamente ser empáticos con él y con nuestra familia, respetando nuestra intimidad . Ahora es tiempo de reconstruir nuestras vidas con amor y sosiego. Dios ha sido fiel, y a Él le doy toda la gloria y honra por siempre. Gracias, gracias, gracias. María Virginia Dorrejo», escribió la jurista en sus redes sociales.

Cronología del caso

Principios del 2000

María Virginia Dorrejo, abogada de profesión, conoce a Marco Streit en Sosúa, donde el ciudadano suizo tenía un restaurante.

2001

María Virginia y Marco se casan y tienen a su hijo Dorian. Poco después del nacimiento de Dorian, Marco experimenta un cambio que fragmenta el matrimonio.

Separación mutua

El matrimonio se separa por mutuo acuerdo. La custodia es compartida: Dorian se queda con su padre los fines de semana.

Julio de 2010

Marco sale del país con Dorian sin autorización previa y utilizando documentos falsos. La embajada informa a María Virginia que Dorian está en Costa Rica con su padre. Marco es detenido por tres meses.

Detención de Marco

Durante la detención de Marco, María Virginia no lleva a Dorian a visitar a su padre y no le explica en detalle las razones de la detención, más allá de que era parte de una investigación.

4 de marzo de 2011

Marco Streit pone en un limbo a María Virginia y Dorian, citándola en la Fiscalía de Niños, Niñas y Adolescentes por violación del régimen de visitas. A pesar de la acusación, María Virginia no se opone a que Marco y Dorian se vean, acordando visitas supervisadas en la Fiscalía.

Acuerdo de visitas supervisadas

Se establece una visita supervisada cada viernes durante una hora, a las tres de la tarde. María Virginia espera en la Fiscalía o cumple con compromisos laborales durante la visita.

Día de la desaparición

María Virginia no puede asistir a la visita supervisada debido a compromisos laborales y delega en Amín, su hijo mayor, llevar a Dorian. A las tres y media de la tarde de un inolvidable 4 de marzo de 2011, recibe la llamada que cambiaría su vida: Marco Streit había raptado el niño sacándolo fuera de República Dominicana.

María Virginia Dorrejo ha expresado su profundo alivio y alegría tras recuperar a su hijo, afirmando que ahora es el momento de reconstruir sus vidas con amor. Este emotivo momento marca el final de una angustiosa separación y el comienzo de una nueva etapa para Dorrejo y su hijo.

La recuperación de su hijo es el resultado de esfuerzos intensos y colaborativos entre las autoridades, la comunidad y la familia, quienes trabajaron incansablemente para asegurar su regreso a salvo. Dorrejo ha agradecido a todos los que apoyaron su lucha y contribuyeron a este desenlace feliz.

Dorrejo expresó su deseo de centrarse en el bienestar emocional y físico de su hijo, asegurándose de que reciba todo el apoyo y cuidado necesarios para superar cualquier trauma y adaptarse a su entorno familiar. Además, subrayó la importancia del amor y la unidad familiar en el proceso de sanación y reconstrucción de sus vidas.

Este caso resalta la importancia de la colaboración comunitaria y el apoyo institucional en la resolución de situaciones difíciles, y sirve como un recordatorio del poder del amor y la resiliencia en tiempos de adversidad.